domingo, 22 de septiembre de 2013

Pseudociencia en la publicidad.

En este artículo voy a hablar acerca de la pseudociencia en la publicidad. 
La publicidad es un medio lleno de tiburones. Unos se comen a otros, y el fin último es comer y no ser comido. Ante la proliferación masiva de la publicidad que inunda nuestras pantallas, los anuncios, las marcas, necesitan recurrir a la diferenciación. ¿Cómo diferenciar su anuncio entre un mar frenético de miles y miles como él? 
No hay que fiarse de anuncios que digan: a mí me funciona, es producto natural, si se dicen llamar productos milenarios o antiguos, cuando digan está comprobado con estudios científicos...Aquí no muestre su indiferencia, acuérdese de que su principal función es vender. 


Ecobalas, ionizadores, cepillos dentales iónicos...Y la zona privilegiada del escaparate, en el centro y a la altura de los ojos, debidamente destacados, la ocupaba una ordenada exposición de productos milagro.
Un ejemplo de la pseudociencia son los anuncios de la teletienda, como por ejemplo la baba de caracol. Anuncia que su baba tiene una sustancia capaz de regenerar su piel, dan información sobre ello adornada de frases tales como 'demostrado científicamente' o 'producto natural'. Aquí se recurre a la diferenciación. Existen muchos casos más sobre los engaños en la publicidad para captar su atención y hacernos creer que merece la pena comprarlo.

1 comentario:

  1. Está interesante, pero no acabo de ver que sea un artículo tuyo.
    Tómatelo con más calma y escribe como sabes.

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